"(...) Algunos errores solo tienen mejores consecuencias para unos que para otros. Pero no puedes dejar que el resultado de un error te defina por siempre. (...)"
("Me before you" de Thea Sharrock)
El miércoles pasado, en el día que dedico a las películas, al cine, he comenzado con un libro... y hoy lunes haré al revés, empiezo con una película que me llevará a los libros, los que han sido los últimos de el mes de febrero que acaba de terminar.
Un invierno de algunos años atrás (enero/2017), alguien me dijo: "mira esta película... te encantará."... yo ya había visto el trailer, pero que esta persona en particular me lo dijiera, me asombró. Por lo que no pude hacer de menos de verla.
¿Qué decir? ...me llegó. Yo, que puedo pasar por las peores situaciones sin derramar una lágrima, me siento delante de la gran pantalla y lloro como una niña. Esta película trata un tema complejo que es el derecho a decidir sobre la propia vida y el ponerle fin a la misma. Como dije es una cuestión difícil de la cual cada uno de nosotros puede tener una idea, una opinión preconcebida, una teoría del cómo, cuándo y porqué, pero que estoy segura cambiaría totalmente si nos encontráramos viviendo esa situación. La película me gustó tanto que al día siguiente de verla, ya tenía el libro en el que se basaron, entre mis manos. Éste era el primero que yo leía de Jojo Moyes y quedé totalmente atrapada, ya que me encontré con una historia no sólo muy bien escrita, sino que empezaba y terminaba al llegar a la última página...
Imagínense mi sorpresa entonces diez días atrás cuando me enteré que la autora, no sólo había escrito un libro de continuación, sino dos... (a veces pienso que vivo dentro un huevito Kinder...🤷🏻♀️); "Yo después de ti" y "Sigo siendo yo". Como es de suponerse tardé segundos en obtener las versiones digitales de esos libros y empezar a leerlos (obviamente uno y luego el otro...😏) y...
Si bien con la primera historia, sea la película que con el libro, adoré al personaje de Louisa "Lou" Clark -que Emilia Clarke interpretó de forma brillante, al igual que Sam Claflin a Will Traynor, algo nada fácil-, esta vez casi llegué a querer darle dos zamarreos como Dios manda. Ya en esta segunda parte, "Yo después de ti", me resultó cansadora la historia, sentía que todo el tiempo parecía recuperarse y luego... zas!, de nuevo hacia atrás, aún si ya han pasado dos años desde todo lo anterior. No que yo pretenda poner límites o fechas de vencimiento al dolor de una pérdida, pero es que me ha dado la sensación que tanto valía si decían que habían pasado dos días, dos meses o dos años como explica al inicio de esta segunda parte. Lo mismo que el resto de los personajes que la acompañan: su particular familia; los distantes padres de Will; Lily, esta adolescente rebelde sin causa ni pausa, hija de Will que se presenta de buenas a primeras; el único que sí rescato ha sido Sam, esa nueva esperanza que parece asomar en la vida de Lou.
Por eso, de este modo, tal vez no muy entusiasmada, llegué a la tercera parte de esta trilogía; "Sigo siendo yo". Pero mi lado perseverante, ese al que le gusta terminar lo que comienza, ganó la pulseada y menos mal que así fue. Porque aquí he podido reconciliarme con Lou, volví a reírme de sus locuras y me fue imposible no imaginar a la Clarke también en estas nuevas aventuras. Los personajes masculinos, sea Sam que Josh, aquel que tanto le recordará a Will y que hará temblar su relación a distancia, me han gustado, aunque no terminan de conquistarme como lo hizo el joven Traynor.
Con todo esto no quiero decir que estos dos libros no me hayan gustado, ni siquiera te diría que no los leas; pero soy de la idea que no hacían falta. El primero era absolutamente perfecto de principio a fin y en lo personal, no necesitaba más aún adorando el personaje de Lou. En definitiva, a la entera trilogía la salva la excelente forma de escribir que tiene esta autora a la cual hay que darle los méritos de su constante éxito.
Un invierno de algunos años atrás (enero/2017), alguien me dijo: "mira esta película... te encantará."... yo ya había visto el trailer, pero que esta persona en particular me lo dijiera, me asombró. Por lo que no pude hacer de menos de verla.
¿Qué decir? ...me llegó. Yo, que puedo pasar por las peores situaciones sin derramar una lágrima, me siento delante de la gran pantalla y lloro como una niña. Esta película trata un tema complejo que es el derecho a decidir sobre la propia vida y el ponerle fin a la misma. Como dije es una cuestión difícil de la cual cada uno de nosotros puede tener una idea, una opinión preconcebida, una teoría del cómo, cuándo y porqué, pero que estoy segura cambiaría totalmente si nos encontráramos viviendo esa situación. La película me gustó tanto que al día siguiente de verla, ya tenía el libro en el que se basaron, entre mis manos. Éste era el primero que yo leía de Jojo Moyes y quedé totalmente atrapada, ya que me encontré con una historia no sólo muy bien escrita, sino que empezaba y terminaba al llegar a la última página...
Imagínense mi sorpresa entonces diez días atrás cuando me enteré que la autora, no sólo había escrito un libro de continuación, sino dos... (a veces pienso que vivo dentro un huevito Kinder...🤷🏻♀️); "Yo después de ti" y "Sigo siendo yo". Como es de suponerse tardé segundos en obtener las versiones digitales de esos libros y empezar a leerlos (obviamente uno y luego el otro...😏) y...Si bien con la primera historia, sea la película que con el libro, adoré al personaje de Louisa "Lou" Clark -que Emilia Clarke interpretó de forma brillante, al igual que Sam Claflin a Will Traynor, algo nada fácil-, esta vez casi llegué a querer darle dos zamarreos como Dios manda. Ya en esta segunda parte, "Yo después de ti", me resultó cansadora la historia, sentía que todo el tiempo parecía recuperarse y luego... zas!, de nuevo hacia atrás, aún si ya han pasado dos años desde todo lo anterior. No que yo pretenda poner límites o fechas de vencimiento al dolor de una pérdida, pero es que me ha dado la sensación que tanto valía si decían que habían pasado dos días, dos meses o dos años como explica al inicio de esta segunda parte. Lo mismo que el resto de los personajes que la acompañan: su particular familia; los distantes padres de Will; Lily, esta adolescente rebelde sin causa ni pausa, hija de Will que se presenta de buenas a primeras; el único que sí rescato ha sido Sam, esa nueva esperanza que parece asomar en la vida de Lou.
Por eso, de este modo, tal vez no muy entusiasmada, llegué a la tercera parte de esta trilogía; "Sigo siendo yo". Pero mi lado perseverante, ese al que le gusta terminar lo que comienza, ganó la pulseada y menos mal que así fue. Porque aquí he podido reconciliarme con Lou, volví a reírme de sus locuras y me fue imposible no imaginar a la Clarke también en estas nuevas aventuras. Los personajes masculinos, sea Sam que Josh, aquel que tanto le recordará a Will y que hará temblar su relación a distancia, me han gustado, aunque no terminan de conquistarme como lo hizo el joven Traynor.
Con todo esto no quiero decir que estos dos libros no me hayan gustado, ni siquiera te diría que no los leas; pero soy de la idea que no hacían falta. El primero era absolutamente perfecto de principio a fin y en lo personal, no necesitaba más aún adorando el personaje de Lou. En definitiva, a la entera trilogía la salva la excelente forma de escribir que tiene esta autora a la cual hay que darle los méritos de su constante éxito.
Detalles del Libro
Título original: "Me before you"; "After you"; "Still you"
Autor: Jojo Moyes
Editorial: Penguin Books
Fecha de la primera edición: 31/diciembre/2012; 23/septiembre/2015; 30/enero/2018
Páginas: 496; 352; 469
