"(...)
Las traiciones durante la guerra resultan infantiles comparadas con nuestras traiciones en tiempos de paz. Los amantes, primero se muestran nerviosos y tiernos hasta que lo hacen todo añicos, porque el corazón es un órgano de fuego.
(...)"
(Traducción de un fragmento de la película)
Creo que a veces, con algunas películas, no hace falta más que mencionarlas... éste es el caso de "El paciente inglés".
El título original es "The english patient" (1996), y fue dirigida por Anthony Minghella, al cual le valió el Oscar como mejor director y mejor película. Una película basada en el homónimo libro de Michael Ondaatje. Es la historia de un hombre con gravísimas quemaduras y al que sólo se lo conoce por "el paciente inglés". Éste es acudido por una joven enfermera, Hana (Juliette Binoche), en un abandonado monasterio italiano a fines de la Segunda Guerra Mundial; y será a través de sus conversaciones, de la lectura por parte de ella de unos diarios de este hombre, y de los numerosos 'flashback' que éste hace, que se desvelará la identidad del mismo. Él es el conde László Almásy (Ralph Fiennes), un cartógrafo húngaro que estaba realizando un mapa del desierto del Sáhara. Al tiempo mantenía una relación con una mujer casada, Katharine Clifton (Kistin Scott Thomas) que sería la principal causa de la situación en la que se encuentra. Hay también algunas otras historias secundarias, que hacen un conjunto perfecto y difícil de olvidar.
Una película con una ambientación y fotografía maravillosa; una banda sonora estupenda; unas interpretaciones cuidadas y excelentemente bien logradas... en conclusión, una historia que no deja indiferente a nadie y que emociona como pocas.
