Sinopsis : "Escribir es recordar, es viajar a la memoria. Nunca hablo lo que escribo, pero siempre hago todo lo que digo. No decir lo que se piensa es de algún modo otra forma de mentir. Pero está mejor vista una verdad a medias que una mentira completa. Odio las mentiras, aunque estén dichas de verdad. Sigo siendo aquella niña que escondía secretos con miedo a que fueron descubiertos."
Deseo volver... volver a este sitio, a escribir de libros, de películas, de música, de todas esas cosas que me apasionan y ¿qué mejor que hacerlo de la mano de alguien que querés y te quiere?
Tengo el libro de Laura entre mis manos, una vez más en estos días, y posee la dualidad de estar cargado de tanto sentimiento, de tantas palabras y emociones y, a la vez, ser tan ligero como una caricia, como esa brisa de verano. Exactamente como su autora. Ella va cargada de "cosas" y, sin embargo, para quienes tenemos la gran, enorme fortuna, de habitar su corazón, siempre tiene espacio para vaciarnos de "pesos" ... para mínimamente hacer más ligeros nuestros hombros.
Si me lees hace tiempo supongo que ya sabrás que conocí a Laura en circunstancias muy especiales; poco después de uno de los momentos más dolorosos de mi vida y fue una de mis balsas de salvataje, sin dudas. Por ello, por esta muy sincera amistad que tenemos; por este profundo respeto que me inspira su trabajo, su pluma, cuando me llamó para decirme que deseaba fuera yo quien escribiera el prólogo de este poemario, me quedé con un nudo en la garganta... la emoción que me impulsaba a decir “sí” sin pensarlo un segundo y el terror de no estar a la altura. Pero fue sencillo, porque dejé que fuera (el) Alma quien escribiese (nunca mejor dicho)... igual que las palabras en esta entrada.
Con "Secuencias" en mis manos... (con)"Secuencias" de que nuestros caminos se cruzaran... "Secuencias" de un ser, de un alma volcada en un libro donde podés sentir(te) en cada palabra y hasta en aquellas que quedan flotando.
Gracias a vos, Osita, por esa presencia permanente a pesar de la distancia -que es sólo física-... gracias por salvarme una vez más... te quiero.
(Podrás ver que ya está totalmente personalizado... lleno de papelitos de colores... y son sólo los primeros, porque pienso "trabajarlos"... ya te contaré!)
Podés imaginar, y no te equivocarías al hacerlo, que si hay un lugar que me gusta conocer y recorrer es una librería. No importa si es chiquita como aquella de Badajoz o enorme como "El Ateneo" de Buenos Aires; lo realmente maravilloso son esos tesoros que allí se encuentran... los libros. Por eso hoy te traigo dos que tienen mucho que ver con estos sitios mágicos.
Sinopsis: Mitsuko tiene una librería de lanza especializada en obras filosóficas. Allí pasa los días serenamente con su madre y Tarô, su hijo sordomudo. Cada viernes por la noche, sin embargo, se convierte en camarera en un bar de alterne de alta gama. Este trabajo le permite garantizar su independencia económica, y aprecia sus charlas con los intelectuales que frecuentan el establecimiento. Un día, una mujer distinguida entra a la tienda acompañada por su hija pequeña. Los niños se sintieron inmediatamente atraídos entre ellos. Ante la insistencia de la señora y por complacer a Tarô, a pesar de que normalmente evita hacer amistades, Mitsuko aceptará volver a verlos. Este encuentro podría poner en peligro el equilibrio de su familia. Aki Shimazaki sondea aquí la naturaleza del amor maternal. Con gran sutileza, cuestiona la fibra y la fuerza de los lazos.
("Hôzuki, la librería de Mitsuko", de Aki Shimazaki)
Ya te conté alguna vez, que con la literatura japonesa tengo una relación un poco extraña... me llama mucho la atención; la mayor parte, me resulta fácil de leer; pero muchas de esas veces me quedo con una sensación un poco ambigua, como si no hubiese entendido todo lo que el autor ha querido transmitir, como si hubiese un significado oculto que no logro decifrar. Con este libro me pasó algo parecido.
Es decir, cuando cerré el libro, tuve la neta sensación que había leído una historia mucho más profunda de lo que podía parecer. Hablar de la elección que hace una mujer ante la posibilidad de ser madre, no es sencillo, y sin embargo, la autora alcanza esto con una delicadeza extraordinaria.
Si todavía no probaste con la literatura asiática, acá tenés una muy buena opción para hacerlo!
DetallesdelLibro Título original:"Hôzuki" Autora:Aki Shimazaki Traducción:Iñigo Jaúregui Eguía (en español) Editorial:Nórdica Páginas:122
Sinopsis: Prepárese para entrar en un mundo único y lleno de encanto, donde el tiempo se ha detenido: estamos en la segunda década del siglo XX, en unos Estados Unidos todavía rurales y de paisajes idílicos, donde conviven los viejos carromatos y los novísimos automóviles. Roger Mifflin, un librero ambulante que desea regresar a Brooklyn para redactar sus memorias, vende su singular librería sobre ruedas (junto a su yegua y su perro) a la ya madura señorita Helen McGill, quien decide, harta de la monotonía de su vida, lanzarse a la aventura y recorrer el mundo. A partir de ese momento se sucederán los encuentros y los desencuentros, y las más divertidas peripecias se darán la mano con las grandes enseñanzas que proporcionaron libros y librero.
("La librería ambulante", de Christopher Morley)
El dicho popular recita que "lo bueno si es breve, es dos veces bueno" y éste es un claro ejemplo.
Como con el libro anterior, éste es una de las propuestas dentro del reto "Serendipia recomienda" y fue un acierto otra vez.
"(...) Un buen libro debe tener algo simple. Y, como Eva, debe provenir de algún lugar cerca de la tercera costilla; debe haber un corazón latiendo en él. (...)"
Y éste contiene una historia de lo más sencilla y que en todo momento, te dibuja una sonrisa en la cara, cosa que creo definitivamente extraordinaria. Vienen ganas de conocer una librería así y, sobre todo, a persona(je)s como los del libro.
DetallesdelLibro Título original:"Parnassus on wheels" Autor:Christopher Morley Traducción:Juan Cárdenas (en español) Editorial:Periférica
Fecha de la primera edición:01/enero/1917 Páginas:138
Sinopsis: Publicado por primera vez en castellano de forma independiente, Los sauces es considerado por la crítica el mejor libro de Blackwood. También lo fue para Lovecraft, quien dijo del autor que nadie se había acercado «a la habilidad, seriedad y minuciosa fidelidad con las que registra las insinuaciones de anormalidad en ciertos objetos y experiencias ordinarios, o a la sobrenatural perspicacia con la que construye, detalle a detalle, las sensaciones y percepciones completas experimentadas en el tránsito de la realidad a la vivencia o la visión preternaturales».
Creo que ya debés saber que el género de terror no me gusta; ni en la literatura, ni en el cine, ni en ningún lado. De todas formas, siendo uno de los libros sugeridos en el reto "Serendipia recomienda", no leí siquiera la sinopsis y me metí de lleno en la historia... madre mía.
Hacía mucho tiempo que un libro no me producía tanta angustia. En pocas, muy pocas páginas el autor te sumerge en un ambiente cada vez más perturbador. Y lo hace con una maestría extraordinaria; es un in crescendo. Las descripciones que hace de la naturaleza que rodea a dos excursionistas en su viaje recorriendo el Danubio, son de un detalle y una calma, que es imposible no retener la respiración esperando que la imaginaria amenaza salga de improviso de cualquier rincón.
Me alegro de haberlo leído, pero la sensación que me dejó me asegura que no habrá una segunda vez... jajajajajajajajaja!
Sinopsis: Una novela visionaria que, sin asomo de complacencia ni demagogia y un sorprendente final, expone la tragedia íntima y colectiva de la Alemania nazi. Concebida como un intercambio epistolar entre Max Eisenstein, un comerciante de arte judío residente en San Francisco, y su socio comercial, Martin Schulse, que había regresado a Alemania en 1932 y escribe a su socio desde allí, Paradero desconocido cuenta el trágico desarrollo de una amistad y la historia de una amarga venganza. Construida con un suspense insuperable, desconcertatemente breve, en el que no sobra ni falta una palabra, esta novela magistral describe vívidamente el veneno en descomposición del nacionalsocialismo. Un relato visionario que, sin asomo de complacencia ni demagogia y un final sorprendente, expone la tragedia íntima y colectiva de la Alemania nazi.
Obviamente esta novela breve no entra en el género de terror, si bien uno podría preguntar(se) ¿hubo algo más terrorífico que la época del nazismo? ...no creo.
Esta historia me impactó, esa es la verdad; porque nuevamente, en muy pocas páginas la autora sabe transmitir tanto, muchísimo. Al inicio me hizo recordar al libro de Fred Uhlman, "Reencuentro", leído para el mismo reto del año pasado... misma época histórica, una amistad... pero aquí todo es diferente. Siendo una novela epistolar (cosa que me encanta), uno puede ver esa transformación en la relación de estos dos amigos y socios. Esa transformación ideológica que sufrieron muchos alemanes, ese "lavado de cerebros" (cuestión que me hace pensar a otras realidades mucho más actuales...), están tan magníficamente planteados, que uno se queda temblando. Y el final... para ponerse a aplaudir de pie.
Repito, dos claros ejemplos de que si "lo bueno es breve, es dos veces bueno".
Sinopsis: En medido de la excelencia de relatos como «Carta de mamá», «Los buenos servicios» y «Las armas secretas», se cortan dos obras maestras: «Las babas del diablo» (que fue adaptado al cine por Antonioni en su mítica película Blow Up) y «El perseguidor», quizás el más perfecto y conmovedor homenaje a un genio del jazz como Charlie Parker.
Para mí hablar de Julio Cortázar no es fácil. ¿Por qué? Porque creo que, como buen argentino que despierta pasiones, o gusta o no gusta y en eso se basa cualquier tipo de comentario. Y esta vez, yo estoy del lado de los "me gusta", por el simple motivo por el que muchas veces es criticado: su modo de escribir.
Pues sí, Julio Cortázar tenía un modo único de hacerlo; y extraordinario agregaría yo. Ninguna de las obras suyas que he leído hasta ahora, me han defraudado. Su lírica, su estilo... nunca leí algo suyo que fuera "esto... masticadito y todo para vos"... sus relatos siempre tienen varias interpretaciones y esto es grandioso. Dos individuos leen "Los buenos servicios" y tendremos dos versiones diferentes... y esto a mí me fascina.
Lo mismo sucede con "Cartas de mamá", hay quien dice que se habla de culpa; otros de aquello que no se expresa; y por qué no, de infidelidad.
"(...) Laura seguía sin nombrarlo, y él se plegaba a su silencio por cobardía, sabiendo que en el fondo ese silencio lo agraviaba por lo que tenía de reproche, de arrepentimiento, de algo que empezaba a parecerse a la traición. (...)"
Y ninguna de estas interpretaciones es equivocada. Ni hablar con "Las armas secretas", el relato que da título al libro... las reflexiones que se dieron a partir de él en el #vecindarioliterario fueron maravillosas.
"El perseguidor" ya lo había leído hace muchos años, y como me gusta muchísimo el jazz, sabía a quién hacía homenaje... al extraordinario saxofonista Charlie Parker.
Aquello que no tenía ni idea, era que "Las babas del diablo" había inspirado una película, por lo cual al terminarlo busqué inmediatamente de cuál se trataba y la vi.
"Blow up" (1966) del director Michelangelo Antonioni con David Hemmings, Vanessa Redgrave, Sarah Miles, John Castle, Gillian Hills and Jane Birkin en los papeles protagónicos. Y, como me sucedió con el relato, es una película para ver más de una vez, tiene varias lecturas... tendría que consultar con un experto de cine clásico como Ethan, para ver qué piensa de ésta.
DetallesdelLibro Título original:"Las armas secretas" Autor:Julio Cortázar Editorial:Alfaguara
Sinopsis: "Una noche, una modélica familia de la Alemania Oriental espera la llegada del padre, el cabeza de familia, que regresa de un viaje de negocios que tiene que suponer para él un ascenso laboral y social. Han preparado mejillones para cenar, su plato preferido, aunque, en realidad, a los demás no les gustan especialmente. Pero pasan las horas y el padre no llega. Madre, hijo e hija empiezan a hablar y poco a poco se va gestando una revolución que pondrá en duda el sistema patriarcal al que se hallan sometidos."
No sé si te pasó alguna vez de escuchar o leer muy buenos comentarios de algo y cuando vos lees (o ves o escuchás) eso, te preguntás ¿qué es aquello que los demás leyeron? Pues a mí me pasó esto con el libro que hoy te traigo.
Hacía tiempo que en varios blogs y sitios de recomendaciones literarias, leía que se recomendaba este libro. Como dicen en España, "le hacían la ola" porque en su brevedad expresaba tanto. Y fue tanta la insistencia que apenas lo vi entre los títulos del reto "Serendipia recomienda", no dudé en leerlo.
Empezó muy bien, admito; era leer y engancharse en esta historia familiar contada con frases breves y contundentes. Como dice la propia sinopsis, una familia -madre e hijos- que esperan al padre que está volviendo de un viaje de negocios y todo lo que sucede con el pasar de las horas y esa vuelta que nunca se produce. Lo que en un inicio parecía un sólido matrimonio y una familia modelo, vamos descubriendo que tan así no es. Entonces te preguntarás ¿qué ha fallado? ...pues que lo sentí inconclusivo. Así... basta. Repito, un muy buen punto de partida, unas cosas más que interesantes... pero tuve la sensación que faltó algo y, lo peor, que no sabría decirte muy bien qué.
De todos modos, sí que me gustó y sorprendió, el estilo de esta joven autora, y fue justamente lo que me impulsó a leerme otros dos libros suyos: "Tiempos de paz" y "Alberta tiene un amante" (aquí encuentras una nota muy interesante), los cuales me han gustado un poquito más. Tal vez no era mi momento para leerlo, el mes de marzo no ha sido de los mejores... pero bueno, ésta fue mi experiencia; por lo cual, si vos lo lees o lo leíste, contame cómo fue... qué es lo que no supe ver.