"Me la recuerdo la primera vez...
la magia de la sala oscura...
las imágenes en aquella gran pantalla...
(me gusta mucho girarme en la oscuridad y ver los rostros de los otros espectadores)
la explosión de sonidos... colores... emociones...
y, delante de mis ojos,
millones de sueños
que se han vuelto todos míos...
Es así desde ese día
y continuará a ser así... por siempre.
Sucede sólo al cine."
Y sí, ayer volví al cine... y él me recibió con esto. Juro que se me llenaron los ojos de lágrimas, de emoción, porque la voz de Monica Bellucci describía exactamente lo que sentía... y fui feliz.
Lo fui por exactamente 134 minutos, porque esta vez, luego de tanto tiempo sin ir, fui la última en levantarme de la butaca y salir de la sala. ¿Y qué mejor que regresar del brazo de Disney? Mi niña interior pegaba unos saltos que la mujer que soy sólo puede soñárselos... jajajajaja!
Así que allí estaba yo para ver uno de los personajes que más he odiado en mi infancia y ¿saben qué? ...luego de esas más de dos horas, terminé amándola!!!
"Crudelia" fue sin dudas una de las protagonistas de mis pesadillas de niña. ¿Quién sino ella, la mujer que deseaba 101 cachorritos de dulces dálmatas para confeccionarse un tapado, hubiera podido ser? Pero Disney, de la mano de Craig Gillespie, ha sabido dar una vuelta a la vieja historia de Dodie Smith de 180°, convirtiéndola en algo totalmente diferente y no menos bello.
Debo admitir que me gusta mucho esto de revisionar a estos famosos personajes "malvados", sus personalidades, sus porqué, cómo y cuándo. Obviamente, cuando este trabajo está bien hecho, porque ya les he hablado anteriormente lo que me sucedió en el caso de "Wicked" con la "malvada bruja del Oeste" de la mágica tierra de Oz. Pero aquí no; aquí hay un trabajo excelente. Con una más que brillante Emma Stone en la piel de la mismísima Crudelia. Acompañada de una grande Emma Thompson y un reparto secundario muy bien elegido. El todo ambientado en una mítica Londres años '70 con todo el auge del punk-rock.
Una nota también de remarcar es la extraordinaria banda sonora que ha sido elegida para la película, para cada escena importante; provoca unas enormes ganas de ponerse a cantar mientras estás mirando a Crudelia hacer cada gesto, cada paso. Y es que estamos hablando de canciones como "Feeling good" de Nina Simone; "One way or another" de Blondie; "Perhaps, perhaps, perhaps" de Doris Day; "Should I stay or should I go" de The Clash, entre tantas otras tanto o más memorables.
No sé qué sucederá en las próximas semanas, si las próximas películas que se deben estrenar me dejarán tan satisfecha, tan feliz, como ésta... pero ha sido un regreso único. Magnífico y totalmente inesperado, porque la verdad es que no había pensado en ir al cine, y en menos de 15 minutos, lo decidí, compré las entradas y allí fuimos. De lo mejor que me ha pasado en los últimos tiempos... tanto, que si pudiera, volvería ya mismo dentro a la sala a verla otra vez.
(Aquellos que tienen niños, llévenlos a ver la película, sobre todo a las niñas... si yo hubiese visto a esta "Crudelia" seguramente no hubiese tenido pesadillas, sino que hubiese soñado con ser así... al menos con los cabellos estoy casi... jajajajajajajajaja!)