"(...)
La amistad, o al menos mi definición de ella, se basa en dos cosas: respeto y confianza. Y deben ser mutuas. Además, se tienen que dar los dos factores; puedes respetar a alguien, pero si no hay confianza, la amistad se desmorona.
(...)"
("Los hombres que no amaban a las mujeres", de Stieg Larsson)
Seré sincera, tenía éste y los otros dos títulos que conforman la más que famosa "Trilogía Millennium", entre mi "lista de libros pendientes", pero ¿para qué complicarme la vida? ...es decir, que ya tengo una infinidad de libros por leer y esta trilogía de algún modo, ya la había "conocido".
La trilogía ha sido llevada a la gran pantalla allá por el 2009, de la mano de Niels Arden Oplev, la cual en mi humilde opinión está muy bien lograda. Una historia ambientada en Suecia, nacida del ingenio creativo de Stieg Larsson y que su versión cinematográfica no desvirtúa. Si bien en toda la trilogía aparecen los mismos actores "principales", Noomi Rapace (Lisbeth) y Michael Nyqvist (Mikael), la segunda y tercera parte fue dirigida por Daniel Alfredson.
Hoy es el "Día de la memoria", donde se recuerda a todas las víctimas del Holocausto, ya que fue un 27 de enero de 1945 cuando las tropas soviéticas liberaron a los prisioneros del campo de concentración nazi de Auschwitz... y, si bien esta película (la primera parte) 'toca' muy sutilmente el tema de la doctrina nazista, es mi opinión que el odio sólo genera más odio; olvidándose, en muchos casos, cuál fue el punto de origen y resaltando la verdadera naturaleza del individuo.