Sinopsis: ¿Qué pasaría si la persona a quien crees conocer mejor resulta ser una perfecta desconocida?
Andrea Cooper lo sabe todo sobre su madre, Laura. Sabe que ha pasado toda su vida en la pequeña ciudad costera de Belle Isle; sabe que su máxima aspiración es llevar una vida tranquila y ser un pilar de su comunidad; sabe que jamás le ha guardado un secreto. Porque todos lo sabemos todo sobre nuestras madres, ¿no?
Su vida da un giro radical cuando una visita al centro comercial se convierte en un baño de sangre y Andrea ve una faceta completamente desconocida de Laura. Porque parece que, antes de que Laura fuera Laura, era una persona completamente distinta. Durante treinta años ha estado escondiendo su anterior identidad, manteniendo un perfil bajo con la esperanza de que nadie pudiera encontrarla. Pero ahora ha quedado expuesta, y nada volverá a ser lo mismo.
Veinticuatro horas más tarde, Laura está en el hospital, acribillada por un individuo que ha pasado treinta años intentando rastrearla y descubrir lo que sabe. La policía quiere respuestas y la inocencia de Laura está en juego, pero no está dispuesta a hablar con nadie, ni siquiera con su propia hija. Andrea inicia un viaje desesperado siguiendo el rastro del pasado de su madre. Y si no puede descubrir los secretos ocultos, puede que no haya futuro para ninguna de las dos.
Pasó nuevamente... hoy les hablaré de un libro que no tengo ni idea cómo llegó a mi biblioteca. Pero allí estaba y, aunque pueda parecer una locura, es el tipo de lectura que a mí me relaja.
Admito que al inicio me perdí un poco, ya que la historia está narrada en dos lapsos temporales diferentes; uno actual, que es cuando se escribió el libro y otro, treinta años antes. De todos modos, apenas pasadas las primeras páginas y ese desconcierto inicial, la historia se vuelve muy interesante. Es la primera vez que leía a esta autora y me gustó su estilo, concreto, esencial. Enseguida están definidos los carácteres de las protagonistas principales, madre e hija; como también los personajes secundarios en la medida que van apareciendo. El ritmo de toda la trama es bastante veloz, es de esas historias que no puedes -ni quieres-, dejar de leer, aún si es tardísimo y tu despertador sonará en un par de horas.
Un libro que te recomendaría si, como yo, te querés distraer un rato. Y fue tanto lo que me gustó, que apenas supe habían hecho una miniserie con la historia, no dudé... la busqué en Netflix y la ví.
¡Qué decepción! ...y no es una cuestión que esté "mal hecha", o que tenga malas actuaciones -por el contrario, me pareció muy buena la elección de Toni Collette y Bella Heathcote-; es sólo que es otra historia.
Es decir, es una adaptación del libro pero a la que le han cambiado tantas cosas, tantos "detalles", que es otra historia con algunos puntos en común. Y sinceramente, no encuentro el motivo de realizar algo así, porque si lees el libro, no es una trama que no se pueda llevar a la pantalla. No sé... es como que he tenido la sensación de ver un "plagio", como si se hubiese querido copiar la historia y cambiar algo aquí y allá para que no se note tanto. Y sé que no es el caso, porque toda la miniserie está presentada como "basada en el libro de Karin Slaughter" y con el mismo nombre... pero ese mal sabor de boca me ha dejado... un pecado.
DetallesdelLibro
Título original:"Pieces of her"
Autora:Karin Slaughter
Traducción: Victoria E. Horrillo Ledesma (en español)
Sinopsis: Esta es la obra más representativa de Horacio Quiroga. En estos relatos, Quiroga se maneja con absoluta maestría en el terreno de la narración de terror (no en vano se lo compara con Poe y Maupassant, como se puede apreciar al leer historias tan estremecedoras como «La gallina degollada»), y nos ofrece uno de los máximos exponentes del modernismo latinoamericano. Es, también, la obra más personal de alguien cuya trágica existencia estuvo marcada tanto por el amor como por la locura y la muerte.
Creo que no hay nadie de mi generación que, en los doce años de escolaridad (por aquel tiempo eran siete escuela primaria y cinco de secundaria), no haya tenido que leer al menos uno de los cuentos de Horacio Quiroga.
La primera vez que yo leí a Horacio Quiroga tenía ocho años y aún hoy, tanto tiempo después, no puedo olvidar ese cuento, "Las medias de los flamencos", y la sensación que me provocó. Pero no fue hasta mi adolescencia que volví a buscarlo y leerlo. Ya había leído algo de Edgar Allan Poe, terminando maravillada con su escritura; y como a Quiroga siempre se lo ha comparado con éste, pues no dudé en ir a la biblioteca por él. Allí encontré una vieja edición -recordemos que este libro se publicó por primera vez en 1917-, y nuevamente fue magia.
Leyendo a Horacio Quiroga se comprende lo que yo entiendo por verdadero terror, que no es algo relacionado con seres de otros mundos, ni con zombies y mucho menos con sangre por todos lados, sino con algo de lo más cotidiano, un gesto "normal", una circunstancia repetida pero con una consecuencia inaudita... algo que no tiene nada de increíble y por eso mismo te congela la sangre al leerlo.
Hay dos cuentos que en lo personal destaco por sobre el resto: "El almohadón de plumas", que es aquello que motivó que no volviera a usar una almohada de plumas hasta el día de hoy y "La gallina degollada", que es el absoluto ejemplo de lo que expresaba en el párrafo anterior.
Por ello no pude (ni quise) resistirme a comprar esta tan bonita edición de Alma Editorial que tanto les recomiendo... miren si será buena que hasta Poe está de acuerdo!
DetallesdelLibro
Título original:"Cuentos de amor de locura y de muerte"